Diego Ancalao Gavilán

La historia de un líder mapuche perseguido y preso político, con una esperanza indomable y fe inquebrantable.

La historia de Diego Ancalao es la historia de un hombre que, ante la adversidad, transformó el sufrimiento en un faro de esperanza, un líder cuyo coraje y visión continúan abriendo caminos en la lucha por la justicia, la dignidad y el respeto por los pueblos originarios. Desde un contexto de marginación, persecución política y personal, Diego se alza como un ejemplo de resistencia, fe y transformación social, personificando el poder del cambio que nace de la unidad, la valentía y el amor.

Un origen de lucha y esperanza

A pesar de las dificultades, su madre se convirtió en una figura fundamental de resistencia y fe en Dios. Trabajadora incansable y valiente, se desempeñaba como asesora del hogar en la casa de la élite santiaguina, un trabajo que le permitió a Diego entender desde joven la distancia entre las clases sociales y la injusticia que atravesaba a su pueblo. Fue su madre quien, a pesar de las amenazas y persecuciones, no solo defendió el sueño de Diego, sino que, con amor y firmeza, le transmitió los valores de lucha, esperanza y dignidad que lo acompañarían a lo largo de su vida.

El 13 de diciembre de 1980, Diego Ancalao nació en el hospital viejo de Purén, en la Región de la Araucanía, Chile. Su vida comenzó en un entorno profundamente marcado por la historia de opresión del pueblo mapuche. Hijo de un obrero forestal mapuche de la reducción indígena del sector rural el Lingue y una madre campesina criolla de Cerro Alto, Diego vivió de cerca las desigualdades que han marcado a la sociedad chilena, donde los pueblos indígenas han sido históricamente ignorados y despojados de su dignidad.

Un joven líder en formación

Desde su infancia, Diego fue un observador de la lucha constante por la justicia. Criado en «La Toma del Esfuerzo», un campamento histórico de exclusión experimentó la discriminación de cerca. A través de la adversidad, se forjó una visión clara: la lucha no debía ser violenta, sino a través del poder de la palabra, la organización y la unidad. A esa edad, Diego ya comprendía que el futuro de su pueblo no se ganaría con venganza, sino con educación, reconciliación y entendimiento mutuo.

A pesar de haber ingresado a la Providencia de Traiguén como alumno del Servicio Nacional de Menores (SENAME), Diego Ancalao superó las adversidades que marcaban su entorno. A lo largo de su formación académica, demostró una resiliencia y determinación excepcionales. Estudió Técnico Forestal, destacándose no solo por su brillante capacidad intelectual, sino también por su innato liderazgo. Fue reconocido por sus compañeros, inspectores del hogar de menores y profesores, quienes vieron en él a un joven con una visión clara y una capacidad única para inspirar a otros, a pesar de las dificultades de su contexto.

Más tarde, en la Universidad de La Frontera (UFRO) de Temuco, Diego consolidó su trayectoria académica. Se graduó como Licenciado en Educación y Maestro, siendo un alumno sobresaliente, cuyos logros académicos reflejaban su incansable dedicación. En este espacio, continuó su ascenso destacándose como Vicepresidente de la Federación de Estudiantes. En su nuevo rol, se convirtió en un líder comprometido, luchando con firmeza por los derechos de los estudiantes de escasos recursos, demostrando que la educación, además de ser un medio de superación personal, podía ser una poderosa herramienta de cambio social.

Este despertar político fue fundamental para Diego: su apadrinamiento por el diputado Edmundo Villouta le abrió los ojos a la importancia del poder político en la lucha por la justicia social. Este apoyo transformó su perspectiva, llevando su liderazgo desde un enfoque social hacia una lucha política que lo llevaría a enfrentar de frente las estructuras de poder de la élite chilena.

La persecución política: un símbolo de resistencia

A lo largo de los años, Diego Ancalao se convirtió en una figura clave en la lucha por los derechos del pueblo mapuche. Sin embargo, su voz también fue considerada peligrosa para aquellos que se beneficiaban del statu quo. En uno de los momentos más duros de su vida, Diego fue arrestado injustamente, en lo que muchos consideraron un acto de represión política. Su esposa, al intentar defenderlo, fue también detenida, en un acto que reflejó la discriminación racial y política a la que se ven sometidos los pueblos originarios.

Pero Diego y su familia no se rindieron. La valentía de su esposa, que organizó una campaña para obtener su liberación y movilizó a la sociedad civil en su favor, marcó el punto de inflexión. La lucha por la libertad de Diego se convirtió en un símbolo de resistencia, demostrando que, incluso cuando los poderosos intentan silenciarte, la unidad y la solidaridad pueden revertir las injusticias más profundas. No solo recobró su libertad, sino que también consolidó la unidad de su familia y fortaleció su determinación de continuar la lucha.

Un líder con visión global

Diego Ancalao no es solo un líder mapuche. Es un hombre que ha trascendido las fronteras de su pueblo, llevando su mensaje de autodeterminación y justicia más allá de las montañas de la Araucanía. Su formación académica y su amplia participación en foros internacionales, como el Foro Mundial de Negocios Indígenas, han sido testimonio de su capacidad para articular una visión global. A través de su lucha, ha demostrado que los derechos de los pueblos indígenas no solo son una causa local, sino una cuestión universal, un tema que afecta a todas las naciones.

Herederos de la resistencia de líderes como Lautaro y Pelantaro, Diego continúa la lucha por la autodeterminación de los pueblos indígenas. Sin embargo, su visión es más inclusiva: no se trata solo de ganar derechos para su pueblo, sino de crear un mundo donde la justicia, la equidad y la paz sean alcanzables para todos.

“Amulepe Taiñ Weichan”: La lucha no termina

La vida de Diego está regida por dos principios fundamentales: esperanza y fe inquebrantable. Su lema «Amulepe Taiñ Weichan» (La lucha continúa) es más que un grito de guerra, es una afirmación de que, incluso cuando todo parece perdido, el pueblo mapuche, al igual que cualquier pueblo digno, se levantará una y otra vez. «Wewaiñ Marichiweu» («Venceremos, si uno cae, diez se levantarán») es la promesa que se transmite de generación en generación, un recordatorio de que la lucha por la justicia es infinita, pero siempre posible.

Cada obstáculo que Diego ha enfrentado en su vida ha sido una oportunidad para avanzar. Su capacidad para transformar el sufrimiento en esperanza, para convertir las persecuciones en luchas por los derechos humanos, ha sido una inspiración para aquellos que creen en un mundo más justo. Su vida es prueba de que el cambio no es una utopía, sino una acción diaria que se construye con perseverancia, unidad y amor.

Un estadista de corazón y alma

A lo largo de su vida, Diego Ancalao ha demostrado que ser un verdadero estadista no depende de la influencia que uno ejerza sobre el poder, sino de la capacidad para transformar la realidad de su pueblo. A través de su valentía, su determinación y su fe, ha logrado que la causa indígena sea reconocida en foros internacionales y en el corazón de los chilenos, proponiendo soluciones basadas en la sabiduría ancestral y la dignidad.

Diego ha dejado en claro que el futuro de los pueblos indígenas no está solo en sus manos, sino en las manos de todos aquellos que creen que el cambio es posible. En su vida y obra, se refleja una lucha constante por un mundo más inclusivo, justo y equitativo.

Una Larga Lucha por la Dignidad

Diego Ancalao es un nombre que resuena en la historia reciente de Chile, un hombre que ha estado en el ojo del huracán político, enfrentando persecución y luchando por sus ideales. Su vida ha estado marcada por su incansable trabajo en pro de los derechos civiles y su activa participación en la defensa de la comunidad mapuche, su pueblo de origen. A lo largo de los años, Diego ha demostrado ser un líder multifacético, con una carrera que no solo se ha limitado a la lucha política, sino que también ha destacado en el ámbito deportivo, en el derecho, y en el ámbito académico.

Desde una temprana edad, Diego Ancalao demostró su capacidad de lucha y resiliencia, ganándose el respeto no solo por su trabajo, sino también por su dedicación en cada uno de los ámbitos en los que se involucró. Como atleta, representó a Chile en diversas competencias internacionales de karate en Estados Unidos y América del Sur. En 2000, fue reconocido como el mejor deportista del año por el Círculo de Periodistas y la DIGEDER Araucanía, un premio que consolidó su nombre en el panorama deportivo nacional.

No obstante, su papel como líder social y político fue lo que realmente definió su trayectoria. En los últimos años, Ancalao se destacó como precandidato a la presidencia de la República de Chile, tras ganar una primaria en el sector independiente luego del levantamiento social que sacudió al país. Esta candidatura representaba una amenaza para ciertos sectores del poder, pues un mapuche con posibilidades reales de llegar a la presidencia del país era visto como un reto para el statu quo.

La persecución política que sufrió tras su postulación presidencial fue sin precedentes. En un giro que sorprendió al país, Ancalao fue acusado de fraude electoral, una acusación que carecía de fundamento alguno. El principal argumento de la fiscalía era que el fraude se habría cometido por el simple hecho de que Ancalao figuraba como candidato. Sin embargo, el requisito sine qua non para que exista fraude electoral es ser candidato inscrito oficialmente, algo que Ancalao nunca hizo, lo que dejó claro que la acusación era completamente infundada.

Se ha hablado mucho sobre el supuesto fraude electoral de Diego Ancalao, pero lo que no se menciona con frecuencia es la realidad detrás de su caso. Fuentes cercanas a Ancalao aseguran que fue víctima de una operación política y de inteligencia, diseñada específicamente para impedir que un líder mapuche con posibilidades reales de llegar al poder pudiera competir.

Diego Ancalao: Una Larga Lucha por la Justicia y la Verdad.

La historia de Diego Ancalao, activista mapuche y líder político está plagada de luchas, sacrificios y claros ejemplos de injusticia. Desde su destacada participación como atleta, representando a Chile en competencias internacionales, hasta su involucramiento en la política como precandidato presidencial, Ancalao ha sido una figura clave en la defensa de los derechos civiles y la autodeterminación de los pueblos originarios. Sin embargo, su camino hacia la justicia ha estado marcado por la persecución política, las acusaciones infundadas y la violación de sus derechos fundamentales.

El 5 de agosto de 2023, Diego Ancalao fue detenido y puesto en prisión preventiva por casi dos años, acusado de delitos financieros como fraude al fisco, cohecho, lavado de activos y utilización ilegal de personalidad jurídica. A pesar de las claras pruebas de su inocencia, la acusación se mantenía sin fundamento. De hecho, el 10 de agosto del mismo año, el verdadero responsable de los delitos confesó ante el Ministerio Público que Ancalao había sido injustamente acusado y detenido solo por motivos políticos.

Sin embargo, a pesar de la confesión y de la evidencia que demostraba su inocencia, el fiscal regional de la región de Los Lagos decidió mantener las pruebas bajo secreto por más de un año, en un acto que ha sido calificado por expertos en derechos humanos y justicia como una flagrante violación al debido proceso. Este accionar reveló el prejuicio racial y el trato desigual hacia las comunidades mapuche. En audios filtrados de la investigación, el fiscal mencionó que «Ancalao se puede fugar de una comunidad a otra donde el Estado no llega», lo que, además de ser un acto de discriminación racial, socavó los principios fundamentales de la justicia. Cabe resaltar que, en ningún ordenamiento jurídico, la condición indígena se contempla como agravante para un delito.

Este tipo de trato no solo afecta a Diego Ancalao, sino que también pone en entredicho la integridad del sistema democrático chileno y del pacto social que debería regir las relaciones entre el Estado y sus ciudadanos. Ancalao, en su carta abierta al presidente Gabriel Boric, denunció las violaciones al debido proceso y la discriminación racial que sufrió. Esta denuncia fue respaldada por una petición formal ante el Tribunal Constitucional de Chile, y se expuso ante el examen anual de derechos humanos ante Naciones Unidas, lo que generó repercusiones internacionales.

Uno de los episodios más indignantes de su caso ocurrió cuando Gendarmería de Chile, bajo la dependencia del Ministerio de Justicia, sancionó a Ancalao por dar una entrevista, lo que fue interpretado como un ataque directo a su derecho a la libertad de expresión. Sin previo aviso, fue trasladado a otro módulo y se le impidió recibir la visita de sus hijos, en total desacato de una orden judicial que le permitía recibir visitas. Esta represalia no solo fue un acto de censura, sino también un recordatorio de cómo el sistema penal chileno ha sido utilizado para restringir la libertad de pensamiento y expresión, especialmente cuando se trata de aquellos que desafían el poder establecido.

A pesar de las injusticias que sufrió, Diego Ancalao no se dejó derrotar. En su declaración judicial, renunció a su derecho a guardar silencio y desmintió todas las acusaciones, desmontando las pruebas falsas y los testimonios adulterados del Ministerio Público y la Policía de Investigaciones (PDI). Su defensa fue clara y contundente: las acusaciones en su contra y el proceso judicial representaban un montaje similar al caso de «Operación Huracán», una estrategia para desacreditar y eliminar a los líderes políticos mapuche del escenario público.

Ancalao fue procesado por recibir fondos públicos que nunca obtuvo y por servicios profesionales que jamás fueron ilegales. En cuanto a las acusaciones de lavado de activos, nunca tuvo acceso a los fondos mencionados ni a los recursos públicos de los que se le acusaba de haber malversado. Su único «delito» fue ser quien es: un líder mapuche que, lejos de ser un criminal, fue procesado por representar un desafío al orden político y social que prevalece en Chile. Esta persecución, que recuerda las tácticas utilizadas en regímenes autoritarios como el nazi o las dictaduras latinoamericanas, revela la fragilidad del sistema democrático cuando los opositores son atacados por su pensamiento, origen étnico o condición política.

Mientras estuvo en prisión, Diego Ancalao rememora con profundo cariño y gratitud el mensaje que recibió de uno de los más emblemáticos miembros del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), Guillermo Lebrech, quien ha sido no solo un amigo cercano, sino también uno de sus asesores y formadores más influyentes. Lebrech, a quien Diego considera el único de la antigua izquierda que se mantuvo consecuente con sus principios, le envió un mensaje que quedó grabado en su mente y corazón.

En sus palabras, Lebrech le transmitió un consejo lleno de sabiduría y fortaleza: “Díganle al weichafe que se tome la cárcel con dignidad, como lo hicieron Mandela y Mujica. Que aproveche este tiempo para formarse espiritual y mentalmente, para que transforme la adversidad en un triunfo. Que no ande llorando como algunos supuestos líderes.”

Este mensaje resonó profundamente en Diego Ancalao, quien en esos momentos de aislamiento y angustia encontró en las palabras de Lebrech una fuente de motivación y una guía hacia la resiliencia. Para Diego, la cárcel no fue solo un lugar de sufrimiento, sino un espacio para forjarse, fortalecer su espíritu y reafirmar su lucha por la justicia y la autodeterminación del pueblo mapuche.

Entrevistas y notas Relacionadas:
Entrevista con Diego Ancalao en El Mostrador (2020), donde compartió su visión sobre la política chilena y su rol como líder mapuche.
Artículos y columnas de Diego Ancalao en medios de renombre como The Clinic, CNN Chile, y Canal 24 Horas, donde analizó la situación de los pueblos originarios en Chile y su lucha por la autodeterminación.
Revista Mensaje (2019), con un artículo titulado “La lucha mapuche por la justicia y la autodeterminación”, que aborda su perspectiva sobre la historia y los derechos del pueblo mapuche.
Litoral Press (febrero de 2025), en una entrevista en la que Ancalao reveló cómo fue presionado por abogados para aceptar la culpabilidad de delitos que no cometió.
Biobio Chile (agosto de 2024), donde Ancalao desde la cárcel denunció el trato desigual que recibió en comparación con otros procesados, como el caso de Patricio Vallespín.
Soy Chile (octubre de 2024), en una nota donde se informó sobre su permanencia en prisión preventiva y las irregularidades en su caso.
La Tercera (febrero de 2025), donde Diego Ancalao denunció públicamente las irregularidades de su proceso judicial tras salir de prisión preventiva.
Conclusión: Una Larga Lucha por la Justicia

La vida de Diego Ancalao es un testimonio de resiliencia y coraje. A lo largo de los años, ha enfrentado una serie de adversidades que han puesto a prueba su fortaleza, pero ha mantenido su firme compromiso con la justicia y la defensa de los derechos de su pueblo. Su historia es un recordatorio de que, incluso en tiempos de persecución y opresión, siempre hay espacio para la esperanza y la lucha por la verdad.

Como él mismo ha dicho, la lucha continúa. Y, mientras persiste la injusticia, Diego Ancalao se mantiene firme, con la convicción de que su causa es justa y que la libertad y los derechos de los pueblos originarios deben ser defendidos a toda costa. Su vida es un ejemplo de que, a pesar de las adversidades, la justicia y la verdad siempre prevalecerán.

En un país donde las injusticias contra los pueblos originarios aún siguen siendo una realidad palpable, la historia de Diego Ancalao se convierte en un llamado urgente a la reflexión y al cambio. El sistema judicial y político debe cambiar, y la lucha de Ancalao es una muestra de que el camino hacia una sociedad más justa es largo, pero posible.

Premios y Reconocimientos

A lo largo de su vida, Diego Ancalao ha sido reconocido por su incansable lucha por los derechos de su pueblo y por su contribución al desarrollo social y político de Chile. Entre sus premios y distinciones más destacados se encuentran:

Mapuche: Hijo de Dos Naciones (Libro Autobiográfico, 2015).
Ex Miembro de la red Global de líderes y empresarios indígenas.
Ex Presidente del Instituto de Desarrollo del Liderazgo Indígena Canadiense en Chile.
Embajador del Foro Mundial de Negocios Indígenas, Nueva Zelanda 2018.
Otra vez hoy. La tierra se levanta, Hacia un Mundo del Kume Monguen – Buen vivir, libro en el que propone un modelo de desarrollo basado en la cosmovisión indígena.
Beca Doctorado en Desarrollo Indígena, Universidad Maorí, AwanuiArangui.
Ex Vocero de la nueva mayoría Segundo Gobierno Bachelet.
Integrante comité político Segundo Gobierno Bachelet.
Ex Presidente Nacional de la Iz ciudadana.
Premiado como el mejor deportista de Karate por el circulo de periodistas y DIGEDER año 2000.
Reconocimiento a su trayectoria en defensa Derecho Indígenas.
Ex Presidente de la Asociación Nacional de Jóvenes Indígenas.
Ex Vicepresidente Federación de Estudiantes de la Universidad de la Frontera.

Fuentes:

«Diego Ancalao: Mapuche, Hijo de Dos Naciones» (Libro autobiográfico, 2015).
Entrevista con Diego Ancalao en El Mostrador, 2020.
Artículos y columnas de Diego Ancalao en medios como The Clinic, CNN Chile, y Canal 24 Horas.
«La lucha mapuche por la justicia y la autodeterminación», Revista Mensaje, 2019.
“El fracaso de una “Izquierda” que gobierna negando su naturaleza» https://www.elciudadano.com/chile/el-fracaso-de-una-izquierda-que-gobierna-negando-su-naturaleza/03/01/
“Enviaron abogados a presionarme para que yo aceptara la culpa por
delitos que no cometí» https://www.litoralpress.cl/SimbiuPDF/2025/02/12/5705761.pdf
Diego Ancalao desde la cárcel: El trato que la justicia le da a Patricio Vallespín es desigual al mío https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/region-de-los-lagos/2024/08/12/diego-ancalao-desde-la-carcel-el-trato-que-la-justicia-le-da-a-patricio-vallespin-es-desigual-al-mio.shtml
Diego Ancalao tras salir de prisión preventiva: «Me procesaron de una manera similar al Caso Huracán https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/region-de-los-lagos/2025/02/11/diego-ancalao-tras-salir-de-prision-preventiva-me-procesaron-de-una-manera-similar-al-caso-huracan.shtml
Diego Ancalao denuncia irregularidades en su proceso judicial tras salir de prisión preventiva https://www.latercera.com/nacional/noticia/defensa-de-diego-ancalao-denuncia-irregularidades-en-su-proceso-judicial-tras-salir-de-prision-preventiva/T6AON3GEE5GJPI3D4MPW3HRVJI/
Cara publica al presidente de la república de Chile, https://www.pressenza.com/es/2024/12/carta-abierta-de-diego-ancalao-al-presidente-gabriel-boric/
Carta Publica al Tribunal constitucional, https://araucanews.cl/2024/12/19/carta-abierta-de-diego-ancalao-a-ex-presidente-del-tc/
Conclusión: Una lucha que no termina

Diego Ancalao es un líder cuya vida inspira a todos aquellos que, como él, se niegan a ceder ante las adversidades. Su historia de lucha, sacrificio y transformación es un recordatorio de que, por más duras que sean las circunstancias, siempre hay lugar para la esperanza, para el cambio. A través de su vida, Diego ha demostrado que el camino hacia la justicia es largo, pero está lleno de posibilidades, y que el coraje y la fe pueden superar cualquier obstáculo.

Porque como dice Diego: la lucha continúa.